Un camino que, por primera vez desde 1999, volverá a unir a ambos poblados turísticos.
Será literalmente un viaje al pasado por un túnel. Después de casi 20 años las localidades de Potrerillos y Cacheuta volverán a estar unidas por la ruta 82, ya que la obra está prácticamente terminada y se inauguraría a fin de mes.
Así, las imágenes del primitivo camino a Chile que los más nostálgicos aún recordarán, podrán ser revividas pronto. Las autoridades provinciales explicaron que si bien la idea es poner un puesto de peaje, el camino quedará habilitado ya que reconocieron que no tiene sentido no abrir el trazado por este tema aún no definido.
Recordemos que en 1999 la ruta quedó interrumpida por la construcción del dique Potrerillos, ya que parte de este recorrido iba a quedar sumergido -como finalmente sucedió- en el agua. Luego hubo muchas idas y vueltas, un primer tramo del perilago inaugurado en 2007 hasta que recién en abril de 2016 se reiniciaron las obras, que incluye el túnel que se desmoronó y tuvo que volver a construirse.
Ahora, la conexión entre estos dos pueblos andinos volverá a ser una realidad. Los Andes recorrió ayer la nueva ruta y el flamante túnel que pronto turistas y mendocinos podrán conocer para descubrir la montaña de otra manera.
Nuevos viejos paisajes
Actualmente la ruta 82 está habilitada hasta el puente colgante de Cacheuta, viniendo desde la ciudad, y hasta unos kilómetros antes de la boca del túnel por el camino del perilago (del otro lado, desde Potrerillos). En el medio, donde la obra está casi lista, hay muchas novedades que sorprenderán a los viajeros.
Una vez que se cruza la barrera ubicada en Cacheuta, a unos 200 metros, empieza la ruta nueva, con asfalto reluciente y una vista de la pared del dique Potrerillos, con descargadores y aliviadero incluido, que probablemente no han sido vistos por la mayoría de los mendocinos.
Las sorpresas no terminan allí, porque hay una zona de caracoles que ascienden 147 metros en una distancia muy corta y que según los arquitectos de este emprendimiento, fue casi tan difícil de erigir como el túnel del que tanto se ha hablado.
“Va a haber un retorno para quienes no quieran cruzar por el túnel o deseen regresar a Cacheuta”, explicó Federico López, jefe de obra de la empresa Rovella Carranza, una de las dos encargadas -la otra es Cartellone– de llevar adelante los trabajos. Además, esta subida, llamativa por su trazado, tendrá forestales en su entorno.
“A falta de un mes de terminar el trabajo, estamos finalizando de pavimentar el interior del túnel. Probablemente mañana (por hoy) esté listo. También estamos haciendo trabajos de limpieza y tenemos que colocar pintura asfáltica dentro y fuera del túnel”, explicó López.
Mientras los obreros levantaban un cartel que prohíbe el sobrepaso en el ingreso al túnel, López añadió que ya se han colocado la mayoría de las señalizaciones viales y se están haciendo las últimas acciones en lo referido a la protección de taludes.
Últimos retoques
Son alrededor de 200 las personas que han trabajado en esta obra que tiene aproximadamente 2.500 metros de extensión y que ahora se encuentra en su etapa de su puesta a punto. En el túnel, de 450 metros de largo contando algunos tramos conocidos técnicamente como “falsos túneles”, se está terminando de calibrar el nivel de iluminación de las luces, que estaban encendidas al momento de esta nota.
Además deben colocarse las barreras viales conocidas como new jersey -de hormigón o plásticas-. En tanto, se está haciendo el barrido del asfalto sobrante y el miércoles se retiraron los containers que eran utilizados por los empleados de las constructoras.
